Moreno Bernardi, el soldado de nieve - de Guillem Gefaell Alsina [una parte]

"Durante unos meses Guillem Gefaell siguió mis sesiones de trabajo, en una de ellas imprivisaba con piezas de Wagner preparando mi colaboración con Wilhem Latchoumia de allí el texto del presente post..."mb.

 

y de allí un futuro proyecto IN-formal con Guillem.

 

 

Guillem Gefaell Alsina [actor, poeta] asiste a un ensayo de MB para VISION [Wagner]:

Moreno Bernardi, el soldado de nieve [Guillem Gefaell Alsina] ©2012

 

…Si Wagner fuera un dragón, o Tristán e Isolda estrellas olvidadas; si pudiéramos volar, nada sería tan fantástico, tan fantasioso, como la lucha que Moreno Bernardi libra cada día con todo aquello que recubre la pereza, el dolor, el cansancio. Es como de otro tiempo observar como se viste de soledad con calcetines gruesos y baila hasta que no comprendo nada más que el silencio en el que se envuelve. Yo me quedo en un rincón y me parece observar un cuento, una leyenda francesa, algo que debería ser en blanco y negro, o en dibujos animados antiguos, con esa granulación en la imagen que parece que simplemente sea de otro tiempo. Da igual que su cuerpo  haya pasado por esos sitios miles y miles de veces, se convierte en un instante nuevo, porque esta todo su cuerpo en cada instante. Me gusta contemplar desde ese rincón como si yo casi no tocara el aire que respiro. Pero no hay suficientes esponjas en el océano para absorber todas las imágenes que saltan de su cuerpo, de sus pasos, de su danza. Todo se convierte en música si baila. Pierdo la noción de los minutos y me pesa la quietud de mis piernas. Quiero jugar yo también aunque no sepa todavía las reglas del juego, o me las vaya inventando sobre la marcha. Pero son mis ojos los que se mueven con él. Son mis pupilas las que dibujan los puntos de apoyo. Y su soledad, que baila, es dulce como un lago de un río que baja despacio y silencioso, que de la quietud azul salen brazos que te abrazan.

 

Moreno baila:

 

Equilibrio

Exactitud

Retorno

La fuerza de una invasión silente.

El frío de Polonia contra los dragones desbocados de Wagner.

Y en mitad de la nieve, un soldado desnudo

Una espada manchada de sangre.

Una batalla infinita, reverencia al combate de las almas

Metáfora del dolor duplicado de los cuerpos.

 

Y el tiempo abraza a ese soldado, a esa flor en la estepa nevada

Es una hoguera

una caricia que desciende

       el vórtice interno de una caída hacia el presente.

 

Eso debe ser vivir si supiéramos entender con las palabras.

Y lo que nos queda de dios, es su respiración ausente.

 

No hay mas que su cuerpo

en la nieve

 

los pequeños dibujos de sus pasos

Soldado que luchas por la paz de las estrellas

Deja de rendirte

Deja de ganar

La lucha la libramos todos los que lloramos por ti

Nuestras lágrimas son la nieve que te cubre

Soldado infinito

pequeño David de mármol y sangre

Tu Goliat al no existir parece inmenso.

 

Te queremos

Inevitablemente

Porque eres la victoria del frío y la caída de la nieve

La soledad que nos invita a pasearnos por los límites del mar.

[GGA©2012]

 

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